25º Festival Internacional de Cine de Mar del Plata: día 2



Película número 5: Ufa con el sexo. El descaro y el cinismo de la película de Rodolfo Kuhn quitaron risas estrambóticas a muchos pibes en la sala. El personaje fortiano, la calidad de los musicales y la calentura que provocan muchas escenas, sin perder el estilo, no dejan otra cosa que dudas acerca de cómo llegamos a pasar tantos años a puro Porcel y Olmedo. La importancia del film se encuentra por las nubes desde que el magnánimo Pachi no pudo ripear la película la última vez que se emitió en Filmoteca, por canal 7.

Película número 6: Arrieros. En el retrato de una comunidad chilena que rechaza vivir supeditada al movimiento de una cercana Santiago para autoabastecerse mediante la producción y venta de varios alimentos y el aprovechamiento del ambiente cordillerano, omitir los detalles de esta arriesgada pero exitosa manera de vivir nos deja dependientes del poder de escenas y planos repetidos e insípidos. Los miembros de estos grupos trozan el cuerpo de una cabra, ordeñan la leche, recolectan latas, consumen Coca-Cola y Hellman's y acceden a la educación adecuada. Del oasis socioeconómico que representan, sabremos poco y nada.

Película número 7: Oki's Movie. La película más extraña de Hong Sang-soo que yo haya visto es la primera que pude disfrutar con plenitud. Cuatro cortometrajes unen las historias de varios personajes de una escuela de cine: sus maneras de ser son tan retorcidas como uno esperaría de profesores y alumnos de cine, pero las tramas, con tiempo y paciencia, aportan la sensibilidad necesaria a cada situación. Jamás había deseado que una película de Hong continuara, que alguna inquietud más aquejara a alguno de sus personajes, para así poder pasar unos minutos más con los sentimientos reflejados en la pantalla.

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